El Premio Obel 2024 ha sido otorgado a Colectivo C733 por su logro único al completar 36 proyectos públicos en todo México en un periodo de tan solo 36 meses. Estos proyectos surgieron como parte de una iniciativa nacional liderada por la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU) de México. Denominados colectivamente como los proyectos 36×36, estas variadas intervenciones han revitalizado con éxito una amplia gama de áreas urbanas y rurales vulnerables mediante un enfoque colaborativo y centrado en la comunidad. Esto se alinea con el tema central de la sexta edición del Premio Obel, «Arquitecturas con», que destaca iniciativas que impactan positivamente tanto a las personas como al planeta.
Colectivo C733 se formó en 2019 por la unión de los despachos de los arquitectos Gabriela Carrillo (Taller Gabriela Carrillo), Carlos Facio y José Amozurrutia (TO), junto con Eric Valdez (Labg) e Israel Espin. En respuesta al desafío lanzado por SEDATU, los arquitectos se unieron, reconociendo la importancia de las discusiones colaborativas, el intercambio de ideas y la compartición de conocimientos y experiencias.
Uniéndose como un colectivo meta-arquitectónico, la colaboración fue única en su capacidad para involucrar a 30 arquitectos y un equipo multidisciplinario de consultores, transformando rápidamente lo que normalmente es un proceso largo en uno completado en solo unos meses. Su primer proyecto surgió del concurso organizado por SEDATU en colaboración con la UNAM, y muchos de sus miembros son estudiantes actuales o exalumnos y profesores de la Facultad de Arquitectura de la UNAM.
Inspirado en los principios del ingeniero uruguayo Eladio Dieste, el trabajo de Colectivo C733 se caracteriza por principios de diseño modulares, flexibles y rentables. Estos permiten múltiples iteraciones y adaptaciones, anclando cada proyecto en su contexto específico y fomentando un sentido de parentesco arquitectónico entre ellos. A través de sus 36 proyectos, Colectivo C733 ha establecido un nuevo precedente en la revitalización urbana y rural, demostrando cómo los arquitectos pueden navegar hábilmente por diversos desafíos mientras satisfacen las necesidades de la comunidad.
Colectivo C733 ejemplifica el poder de la acción colectiva y el diseño colaborativo para responder rápidamente a las necesidades urbanas urgentes. Su capacidad para transformar 36 comunidades mediante intervenciones arquitectónicas reflexivas, eficientes en recursos y dignas, es un modelo a seguir para futuros proyectos de obras públicas a nivel mundial. – Extracto de la Declaración del Jurado
Apoyado por la Fundación Henrik Frode Obel, el Premio Obel se otorga anualmente, enfocándose en cada edición en un tema específico que aborda un desafío único dentro del entorno construido. Ediciones anteriores han explorado temas como Adaptaciones, Emisiones, Ciudades, Reparación y Bienestar, destacando proyectos pioneros que muestran nuevas formas de trabajar con el entorno construido y natural. En esta edición, el tema desafía los roles tradicionales dentro de la arquitectura para fomentar entornos más inclusivos y adaptables.
Sigue leyendo para descubrir la lista completa de los 36 proyectos públicos completados por Colectivo C733, junto con las descripciones proporcionadas por el Premio Obel, seguidas de la Declaración Oficial del Jurado. El jurado de la edición 2024 está presidido por Kjetil Trædal Thorsen, cofundador de Snøhetta en Noruega, y está compuesto por Nathalie de Vries, socia fundadora de MVRDV; Louis Becker, principal de diseño y socio en Henning Larsen; Dr. Wilhelm Vossenkuhl, profesor emérito de filosofía de Alemania; XU Tiantian, fundadora de DnA en Beijing; Aric Chen, director general y artístico del Nieuwe Instituut en Róterdam; y Sumayya Vally, fundadora y directora de Counterspace.
1. Mercado público Matamoros
Matamoros, Tamaulipas (2019)
En un lote abandonado dentro de un barrio residencial, el mercado organiza el tráfico comercial que fluye a través de un oasis delimitado por una cantera de arcilla.
2. Complejo deportivo Helios
Ciudad Acuña, Coahuila (2019-2020)
Un espacio deportivo multipropósito que, a través de sus muros, organiza el espacio público, creando porches, áreas de descanso y sombras prolongadas con un solo elemento arquitectónico. Este diseño define de manera transparente los límites con el paisaje y democratiza el acceso a los eventos deportivos, integrándose como un verdadero espacio público.
3. Mercado de Guadalupe
Tapachula, Chiapas (2020)
Un espacio comercial que aprovecha los árboles existentes y conecta un barrio a través de una promenade principal definida por la luz y la vegetación. El techo ligero, hecho de bambú de comunidades locales, gestiona el viento, la luz y el agua en beneficio de sus habitantes.
4. Estación Tapachula
Tapachula, Chiapas (2020)
A través de la repetición de un marco estructural, se definen dos escalas de espacios a lo largo de un vacío urbano anteriormente ocupado por la estación de tren. El diseño vibrante de la sección reconoce el tejido urbano y modifica sus fachadas, ya sea hacia el interior o hacia el exterior, según lo requiera el programa. Se gestiona un espacio flexible para diversas actividades, enfocado principalmente en migrantes y la población local.
5. Complejo deportivo Tamulté
Tamulté de las Sabanas, Tabasco (2020)
Una nueva topografía, construida con arcilla local, gestiona una serie de espacios deportivos que se adaptan a los niveles de agua en aumento causados por el cambio climático. Esto permite que las actividades continúen mientras se promueve la cultura de la plantación de árboles y se fomenta la interacción lúdica con el paisaje acuático.
6. Complejo deportivo Nacajuca
Nacajuca, Tabasco (2020)
Una topografía define el curso del río, gestiona los caminos peatonales y organiza nuevas actividades deportivas como el balonmano, el tenis y una pista de atletismo, utilizando arcilla local para crear una nueva relación entre los residentes y el agua.
7. Casa de música
Nacajuca, Tabasco (2020)
Con tres planos inclinados y ocho ejes orientados hacia el río, el proyecto aborda el agua en todas sus dimensiones: recolección, tratamiento, reciclaje y retorno de agua limpia al río. Abre la ciudad a través de una plaza pública que conecta el salón principal con salas más pequeñas y define una materialidad adecuada para su programa acústico, utilizando madera de coco y arcilla local, promoviendo la ventilación cruzada y la luz natural.
8. Mercado Tenosique
Tenosique, Tabasco (2020-2021)
Ubicado en una de las esquinas principales de la plaza pública, cuenta con espacios comerciales en la planta baja y áreas de comedor en el piso superior, rodeando un patio central y creando balcones públicos con mesas y sillas para los comensales que disfrutan de la vista de la ciudad.
9. Casino
Tenosique, Tabasco (2020-2021)
Ubicado en la esquina del Parque San Juan, rompe las fronteras urbanas con dos ejes que crean un porche público construido con ladrillo y vegetación. El programa social se define por este porche que da a la calle y otro porche con salas para talleres culturales, integrados en jardines. En su centro, un gran espacio permite actividades multipropósito.
10. Parque San Juan
Tenosique, Tabasco (2020-2021)
El parque se conecta, a través de sus ejes compositivos, con el Casino y define, mediante un porche de ladrillo y vegetación, la estructura que cubre la cancha multipropósito. Otras actividades, como el parque de bicicletas, el bowl y los juegos infantiles, se entrelazan con la plantación de más de 100 árboles de maderas preciosas típicas de la zona, bosques que han sido severamente deforestados en el último siglo.
11. Colosio
Tenosique, Tabasco (2020-2021)
La falta de agua en el barrio y la presencia de un humedal nos llevaron a proponer una serie de espacios flexibles y comerciales que giran en torno al humedal existente, fomentando una nueva relación entre el agua y sus habitantes. Tenosique, Tabasco (2020-2021).
12. Parque Palenque
Balancán, Tabasco (2021)
La pequeña escala de este parque y su proximidad a diversas escuelas promovieron la idea de crear una estructura de sombra que también sirva como área de juegos con diversas actividades como columpios, toboganes naturales y estructuras para escalar. Es un espacio lúdico construido con tres triángulos y una topografía que canaliza el agua.
13. Plaza y mirador Graciela
Balancán, Tabasco (2021)
El Mirador ocupa un sitio privilegiado junto al río Usumacinta. La estructura original creaba una distancia entre el agua y la plaza adyacente. Así, el Mirador Graciela aborda un programa cultural y comunitario elevado desde la acera, permitiendo que el río se extienda hacia la plaza pública, que cuenta con áreas infantiles, espacios de descanso y zonas de ejercicio para todos los residentes. Por último, el piso superior de la techumbre de arcilla también sirve como celosía solar y ofrece a los residentes una vista del río desde arriba.
14. Balancán campo de béisbol
Balancán, Tabasco (2021)
Una plataforma de ladrillo conecta la calle con una serie de espacios comerciales. Las secciones finales conectan la planta baja con el piso superior, donde se encuentran las gradas, a través de rampas que crean un recorrido. Finalmente, un techo ligero hecho de madera y metal flota sobre esta pieza topográfica para proporcionar sombra.
15. Balancán Mercatram
Balancán, Tabasco (2021)
Dos volúmenes alargados conectan a los peatones y los espacios públicos con áreas comerciales y de servicios comunitarios para los ancianos del barrio. Un volumen de forma cuadrada libera su planta baja para crear un área flexible para diversas actividades y una zona de espera para una conexión de transporte público multimodal. En el piso superior, los techos permiten la entrada de luz natural y la circulación del aire, ofreciendo servicios comunitarios como una biblioteca y talleres para jóvenes y niños.
16. Plaza Balancán
Balancán, Tabasco (2021)
A través de una estrategia simple que consiste en ensanchar el camino peatonal, agregar vegetación e iluminación, un nuevo pavimento más suave y la posibilidad de descender al río en cuatro estaciones, se construye una nueva estrategia para conectar a las personas con el río en varios niveles. El descenso consiste en plazas públicas que también sirven como áreas de descanso para disfrutar de la brisa natural del agua.
17. Plaza central y calles Bacalar
Bacalar, Quintana Roo (2021-2022)
A través de una estrategia de galerías filtrantes, este espacio público se convierte en una infraestructura subterránea que limpia las aguas residuales negras y grises debido a la falta de drenaje y evita que lleguen a la laguna de siete colores. Estos pasajes también se convierten en caminos peatonales con diferentes materiales de superficie en la plaza. Un quiosco central hecho de hierba conecta todos los caminos.
18. Bacalar Mercateca
Bacalar, Quintana Roo (2021-2022)
A través de una estrategia de galerías filtrantes, este espacio público se convierte en una infraestructura subterránea que limpia las aguas residuales negras y grises debido a la falta de drenaje y evita que lleguen a la laguna de siete colores. Estos pasajes también se convierten en caminos peatonales con diferentes materiales de superficie en la plaza. Un quiosco central hecho de hierba conecta todos los caminos.
19. Campo de fútbol y plaza infantil Bacalar
Bacalar, Quintana Roo (2021-2022)
El punto de acceso y límite del espacio comercial está marcado por un área recreativa y lúdica, junto con una serie de pasarelas que conectan el corazón de la manzana con un campo de fútbol público. Estas conexiones son esenciales para proporcionar espacios flexibles y cuidado infantil para los padres que acompañan a sus hijos al trabajo.
20. Bacalar campo de deportes
Bacalar, Quintana Roo (2021-2022)
Un terraplén vegetado define un campo de béisbol dentro de un complejo que también incluye una cancha de baloncesto, áreas de juegos infantiles, equipos de ejercicio y plazas públicas arboladas en el corazón de la zona residencial de Bacalar.
21. Baños de Bacalar
Bacalar, Quintana Roo (2021-2022)
Siguiendo la topografía natural del terreno, una secuencia de plataformas escalonadas hacia la laguna sirve tanto como un área recreativa de acceso libre como jardines de lluvia que limpian el agua que fluye desde las áreas más altas de Bacalar hacia la laguna.
22. Ecoparque Bacalar
Bacalar, Quintana Roo (2021-2022)
Ubicado en uno de los últimos territorios de manglares que quedan en la zona urbana de Bacalar, un sendero de madera atraviesa el sitio, ofreciendo un observatorio de biodiversidad para el aprendizaje y la protección. El recorrido a través de la selva, el manglar y la laguna se complementa con piezas museográficas que explican la historia del lugar y forman parte de un programa más amplio de aulas, talleres y servicios públicos.
23. Municipalidad de Xpujil
Xpujil, Campeche (2021-2022)
En el centro del pueblo, una topografía construida entre muros de caliza y vegetación nativa combina áreas de oficinas y servicios públicos con plazas y jardines al aire libre.
24. Centro cultural y de deportes de Xujil
Xpujil, Campeche (2021-2022)
Bajo el mismo techo de arcilla, una cancha deportiva multipropósito rodeada de aulas y talleres mejora los espacios públicos disponibles en el centro del pueblo.
25. Biblioteca Xpujil
Xpujil, Campeche (2021-2022)
En una pequeña parcela de la zona residencial de Xpujil, una terraza con techo a dos aguas descansa sobre muros de piedra, ofreciendo servicios públicos como una biblioteca y un café en medio de jardines circundantes.
26. Xpujil Mercatram
Xpujil, Campeche (2021-2022)
Dieciséis módulos de pirámides truncadas, suspendidos sobre delgadas columnas metálicas, proporcionan espacios flexibles para actividades comerciales y crean un eje central de movilidad para el transporte público local.
27. Plaza pública de San Blas
San Blas, Nayarit (2021-2022)
En el corazón de San Blas, entre la iglesia principal, el ayuntamiento, tiendas y restaurantes, una topografía peatonal de arcilla conecta con las calles y edificios circundantes. En el centro de la plaza, una estructura metálica ligera sostiene una celosía de arcilla que ofrece áreas sombreadas para actividades al aire libre.
28. Corredor principal de San Blas
San Blas, Nayarit (2021-2022)
En la calle principal que conecta la plaza central de San Blas con la Antigua Aduana y el muelle, se prioriza la movilidad peatonal ampliando las aceras y reduciendo el tráfico vehicular. Se añaden árboles altos para proporcionar sombra, junto con un sistema de iluminación que fomenta el uso nocturno, y bancos que promueven la actividad pública.
29. Iglesia San Blas
San Blas, Nayarit (2021-2022)
Una iglesia del siglo XVI en el centro del pueblo es restaurada a su estado original y reutilizada como un espacio para la expresión artística local.
30. Aduana San Blas Cultural Center
San Blas, Nayarit (2021-2022)
Las ruinas de la antigua aduana en el puerto de San Blas se han transformado en el nuevo Centro Cultural de la Aduana. El edificio existente ha sido restaurado para funcionar como una galería de arte, y se preservan los restos de un antiguo núcleo de escaleras de arcilla como un relicario histórico. Una nueva intervención contemporánea incluye un núcleo de escaleras que reinterpreta la arcilla en forma de celosías, junto con un nuevo edificio para talleres, también construido con arcilla, que complementa la oferta cultural. Un pasarela elevada cruza el sitio a nivel de techo para conectar los edificios. En el nivel del suelo, la exuberante vegetación coexiste con alfombras de arcilla inspiradas en diseños prehispánicos locales.
31. Muelle de San Blas
San Blas, Nayarit (2021-2022)
Un parque público a escala urbana inspirado en la geometría de formaciones naturales, como los pantanos, combina senderos peatonales, jardines y cuerpos de agua, formando una transición entre la calle de acceso y los muelles existentes. Al final, un toldo de 96 metros de largo, que recuerda a los antiguos barcos de madera, sirve como área sombreada junto al mar, una cancha deportiva, una estación de ferry y una plaza pública cubierta.
32. Acceso a Ayoxuxtla
Ayoxuxtla, Puebla (2021-2022)
Un poliedro de tierra compactada marca la entrada al pueblo, con tres lados visibles que simbolizan la tierra, la libertad y la justicia—principios del zapatismo y del Plan de Ayala.
33. Escuela primaria de Ayoxuxtla
Ayoxuxtla, Puebla (2021-2022)
La escuela consta de seis aulas nuevas, complementadas con oficinas, baños y espacios de almacenamiento. Estas áreas están dispuestas alrededor de una plaza techada que sirve como un espacio multifuncional para eventos culturales, educativos y deportivos. La estructura, hecha de acero y madera de pino, incorpora muros de arcilla para aislamiento térmico. Además, incluye un campo de fútbol y un comedor comunitario que ofrece servicios tanto a los niños como a la comunidad.
34. Museo Zapata
Ayoxuxtla, Puebla (2021-2022)
Este espacio restaurado alberga objetos, fotografías y recuerdos históricos de la Revolución Mexicana, recopilados a través de entrevistas con familias locales. Hoy en día, funciona como una biblioteca y centro de medios públicos, sirviendo como un testimonio vivo de la importancia histórica del pueblo durante la Revolución.
35. Ayoxuxtla plaza central
Ayoxuxtla, Puebla (2021-2022)
La plaza funciona como un conector dentro de la topografía compleja, uniendo los espacios comerciales existentes, el centro de producción de tortillas y la iglesia. Crea dos espacios flexibles para múltiples usos, aprovechando el terreno y construidos con el mármol local perteneciente a la comunidad.
36. Clínica Ayoxuxtla
Ayoxuxtla, Puebla (2021-2022)
Un porche público conectado a la calle proporciona una solución para las personas que esperan afuera, mientras que dentro, las tres estructuras principales crean un jardín interior que es observado por un pórtico interno diseñado para que los pacientes esperen.
Declaración del jurado
Para el enfoque de 2024 – Arquitecturas con – el Jurado desea enfatizar la urgencia de repensar las mentalidades convencionales y las formas de práctica para responder de manera colaborativa y colectiva a la creciente vulnerabilidad de las personas y el planeta. Ya no podemos pensar simplemente en diseñar ‘para’ comunidades y partes interesadas, sino que debemos hacerlo ‘con’ ellas.
En un momento en que los arquitectos y diseñadores deben encontrar formas de gestionar complejidades cada vez mayores para asegurar entornos saludables, seguros y receptivos donde diversas comunidades, tanto humanas como no humanas, puedan prosperar, es alentador observar ejemplos innovadores como el del ganador de este año. Colectivo C733 apunta hacia nuevos enfoques en la práctica del diseño y la conformación de nuestro entorno construido colectivamente.
Con sede en México, Colectivo C733 es un grupo de arquitectos auto-iniciado que se formó en respuesta a un ambicioso esfuerzo nacional para revitalizar áreas urbanas y rurales vulnerables, planteado por la SEDATU (Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano de México). El colectivo apunta hacia nuevos enfoques para abordar necesidades urgentes y abrumadoras en comunidades desfavorecidas, entregando de manera notable 36 proyectos de intervención diversos en 36 meses (36×36). Y lo hicieron negociando una compleja red de «conexiones» en constante cambio, mientras navegan hábilmente por desafíos sociales, políticos, ambientales y financieros.
Al diseñar juntos, ‘con’ un elenco de partes interesadas en constante fluctuación, y al utilizar habilidades y recursos compartidos, este meta-colectivo arquitectónico ha logrado comprimir procesos que antes podrían haber tomado años en solo unos pocos meses, algo que generalmente no se escucha dentro de los estándares de la industria actual.
Iniciado por Gabriela Carrillo, Carlos Facio, José Amozurrutia, Eric Valdez e Israel Espin, una clave del éxito de Colectivo C733 radica en su nombre: sintetizando las ideas del ingeniero uruguayo Eladio Dieste, el grupo se propuso diseñar proyectos y espacios públicos que sean Lógicos (7), Eficientes (3) y Económicos (3), además de de manera Cósmica (C).
Este enfoque estratégico permitió a C733 generar un sistema de construcción modular, flexible y de bajo costo que permite numerosas combinaciones e iteraciones contextualizadas, resultando en una familia de obras con una clara afinidad arquitectónica. Por lo tanto, aunque los proyectos varían enormemente en comunidad, contexto y tipología—desde instalaciones deportivas, de salud y educación hasta mercados, centros comunitarios, espacios públicos y edificios culturales—hay una firma digna y tectónica que une los 36×36.
El compromiso y la dedicación hacia la comunidad, así como el diseño informado, receptivo y rápido que ha producido Colectivo C733, representan un enfoque esperanzador del que el jurado cree que se puede aprender y adaptar en todo el mundo.