Urbanitree, el estudio liderado por Vicente Guallart y Daniel Ibáñez, firma Terrazas para la vida, un proyecto de 40 viviendas sociales ubicado en el barrio de la Verneda i la Pau, en Barcelona. Gracias a su estructura industrializada de madera contralaminada (CLT) de ocho plantas, el edificio alcanza un balance negativo de emisiones de CO2.
El proyecto se adjudicó a través de un concurso organizado por el Ayuntamiento de Barcelona en plena pandemia del COVID 19 en el que se premiaba el edificio que se hubiera podido construir de forma más rápida y ecológica para combatir las crisis habitacional y climáticas en la que vivimos, buscando especialmente mayor eficiencia constructiva y mayor reducción de emisiones asociadas a los procesos y materiales.

Foto: Adrià Goula
El proyecto incluye un edificio residencial en CLT y un sistema circular. En la planta baja habrá un Ateneo de Fabricación Digital (FabLab), un centro con máquinas de impresión 3D, corte por láser y una máquina CNC, además de un espacio para investigación y producción de vegetación hidropónica. Sobre esta planta se disponen 40 viviendas de protección oficial, cuyas terrazas, suspendidas desde la cubierta mediante montantes verticales, modulan la fachada y constituyen el elemento compositivo más distintivo del proyecto. En la parte superior, se ha diseñado una cubierta para uso comunitario.

Foto: Adrià Goula
La distribución de la planta se basa en dos estrategias principales. Primero, la medianera se usa para la infraestructura de comunicación vertical y el paso de instalaciones, liberando así las fachadas para optimizar la luz natural y la ventilación. Segundo, un patio central comunitario proporciona luz y ventilación a los interiores y facilita el acceso a las viviendas mediante una pasarela, fomentando relaciones entre vecinos.

Foto: Adrià Goula
Todas las estancias de las viviendas tienen fachada al exterior y grandes terrazas para actividades al aire libre. El invernadero solar produce alimentos y energía mediante bandejas de seis metros de altura con riego centralizado e iluminación LED, funcionando como prototipo de agricultura vertical. La envolvente de vidrio del invernadero incluye una superficie fotovoltaica semitransparente que genera energía para elementos comunes y el sistema de LEDs. Además, una serie de árboles frutales en la terraza crea un espacio comunitario y de ocio. En la planta baja se construirá un casal de barrio.

Foto: Adrià Goula

Foto: Adrià Goula

Foto: Adrià Goula

Foto: Adrià Goula

Foto: Adrià Goula
spanish-architects