El Colegio de Arquitectos del Perú (CAP) saludó la realización del II Simulacro Nacional Multipeligro 2024, en un país como el nuestro, con alto porcentaje de autoconstrucción que pone en situación vulnerable a la población que habita edificaciones inseguras en zonas de alto riesgo.
Su decana, la arquitecta Lourdes Giusti, dijo que estos ejercicios permiten a las entidades integrantes del Sistema Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres (Sinagerd) y de la población en general estar preparadas para responder de manera eficiente y oportuna ante la presentación de peligros de origen natural o inducidos por la acción humana, con un carácter inclusivo y un enfoque de género e intercultural.
En ese sentido, instó a la población a tomar consciencia de los peligros que confrontan los desastres naturales, como huaicos, inundaciones, sismos y terremotos, y participar en los simulacros de manera ordenada y comprometida.
En declaraciones a El Peruano, la decana dijo que los principales problemas de la vivienda en el país, además de la brecha en el acceso, es autoconstrucción de las propiedades, sin apoyo técnico y profesional, y el asentamiento en zonas de alto riesgo no mitigable, como quebradas y cuencas.
Giusti Hundskopf respaldó la propuesta del Ministerio de Vivienda para otorgar un bono especial a las familias que viven en las zonas de alto riesgo, no mitigables, para que se trasladen definitivamente a una vivienda segura del programa Mivivienda.
Sin embargo, señaló que también es importante dar al sector privado, para que también aporten en la solución de este problema.
Recordó, por ejemplo, que la propia Ley de desarrollo urbano sostenible reconoce como nueva categoría la vivienda de interés social prioritaria, no solo de interés social, para capas sociales medias, sino de sectores en la que impostergable una reubicación.
Sin embargo, señaló que cuando los desarrolladores identifican los terrenos para construir estas viviendas, y solicitan la Certificado de factibilidad de servicios, chocan con que las empresas de agua y luz no tienen planes de coberturas a esos espacios, con lo cual el proyecto colapsa, y lo paradójico, dijo, es que estos terrenos luego son invadidos.
La lideresa de los arquitectos limeños señaló que, felizmente, ya se está trabajando en el gobierno, en virtud de las facultades legislativas delegadas por el Congreso, para dictar una norma que soluciones este problema.
Dicha norma buscaría soluciones alternativas, además de que los desarrolladores van a tener la posibilidad de presentar sus propias soluciones, de manera que el proyecto de vivienda continúe.
La decana del Colegio de Arquitectos del Perú también instó a las municipalidades a fijar el presupuesto que ordena la ley para implementar sus planes de contingencia y sus centros de operaciones, pues en muchas comunas, estas partidas o no se asignan, o lo gastan en otros rubros.