En Šlapanice, las autoridades municipales decidieron construir una nueva guardería en el solar de una antigua tienda de barrio en un barrio residencial. Es una ubicación tranquila entre casas familiares, pero el espacio era limitado.
El proyecto requería dos aulas, instalaciones para el personal y una amplia zona exterior, todo en una parcela bastante pequeña. Inicialmente, se propuso una guardería clásica de dos plantas.
Pero no queríamos ubicar una de las aulas en la planta superior y privarla de una conexión directa con el jardín. En su lugar, ideamos una distribución eficiente que integra ambas aulas en la planta baja, con un guardarropa central que también funciona como el espacio principal de circulación del edificio. Las compactas plantas se amplían con terrazas exteriores, lo que permite a los niños disfrutar del patio delantero y parte del jardín sin necesidad de cambiarse de zapatos. Ambas aulas tienen grandes ventanales que dan a la calle y al jardín, y un aula exterior en la azotea con jardineras elevadas ofrece la sensación de estar en la cubierta de un barco. Se accede a través de una sala de profesores en la planta superior o por una escalera de caracol blanca directamente desde el jardín.
La planta baja del edificio se alinea con las casas vecinas, protegiendo el jardín del ruido de la calle y la calle del ruido del parque infantil. La planta superior, donde se ubican las oficinas y la sala de profesores, realza la presencia del edificio en la esquina.
La entrada principal se encuentra en el lado norte y está marcada por un retranqueo en la fachada. Este retranqueo se creó para mantener la línea de la calle de las casas adyacentes, maximizando al mismo tiempo la superficie edificable de la parcela. Además, permite una clara visibilidad de la entrada y crea un acogedor patio delantero, un espacio para las despedidas matutinas y para finalizar los juegos de la tarde. Parte del patio delantero cerrado sirve de terraza para una de las aulas.
El edificio presenta una estructura simple, una cubierta plana practicable y grandes ventanales que revelan los vibrantes colores del interior. En el lado sur del jardín, los grandes ventanales están protegidos con persianas amarillas semitransparentes.
La fachada está decorada con revestimiento de ladrillo y enrejados de madera delante de las ventanas, suavizando la escala y aportando calidez.
Los visitantes entran por una puerta de cristal al guardarropa central de color amarillo brillante, que sirve como pasillo principal para todo el jardín de infancia. Desde aquí, se puede acceder fácilmente a las aulas y al jardín. El guardarropa también conecta con las zonas de servicio de comidas, los baños del personal y la escalera que sube a la planta superior.
En el interior, las aulas se dividen en dos zonas con fuertes contrastes de color: una para comer y otra para jugar. Esta zonificación ayuda a organizar la rutina diaria por la mañana y se convierte en un popular espacio de juego por la tarde. A pesar de su tamaño compacto, las aulas se utilizan eficientemente gracias a los muebles de pared a medida, que ofrecen espacio de almacenamiento y también sirven como elementos de juego. Las ventanas, que dan tanto a la calle como al jardín, cuentan con amplios alféizares para sentarse, ofreciendo incluso a los niños más pequeños buenas vistas del exterior. Los techos acústicos de lana de madera, los suelos de vinilo suave y las persianas interiores contribuyen a crear un ambiente acústico agradable.
En la planta superior se encuentran la oficina del director, una sala de descanso para el personal y las áreas de soporte técnico. Desde esta planta también se accede al aula de la azotea. Una fina barandilla blanca se encuentra retranqueada respecto al borde de la azotea verde, haciéndola apenas visible desde la calle. La espaciosa terraza de la azotea, con sombra y parterres elevados, da la sensación de estar a bordo de un barco. Una escalera de caracol blanca la conecta con el jardín inferior, realzando esta sensaci.
Aunque el jardín no es grande, ofrece todo lo que necesita un jardín de infancia. A lo largo de la valla este se encuentra una gran estructura de escalada de madera de acacia y la escalera de caracol. Las terrazas se conectan a las aulas mediante paredes corredizas de cristal y dan a un arenero rodeado de bloques de hormigón para sentarse. A lo largo de la valla sur se encuentra un pequeño escenario con casitas de juego y espacio para guardar juguetes. En el centro del jardín, un cerezo ornamental dará sombra al arenero y a la zona de asientos. Una franja de césped con un sendero pavimentado y una pequeña puerta separa la zona de juegos de la calle. Una valla de madera y un borde de arbustos ornamentales forman un agradable telón de fondo para las vistas desde el interior.
Las distintas zonas del jardín, definidas por diferentes materiales y límites espaciales, ofrecen numerosas oportunidades para juegos y competiciones, a la vez que definen claramente los límites. Es un espacio lúdico y lleno de posibilidades, fácil de manejar tanto para niños como para adultos.
El edificio está construido con bloques cerámicos con aislamiento exterior. Los techos monolíticos de hormigón armado cuentan con paneles acústicos de lana de madera, y las paredes interiores son de bloques de hormigón celular. Las grandes ventanas fijas y correderas, así como las puertas de entrada, son de perfiles de madera y aluminio con triple acristalamiento. Todas las ventanas están equipadas con persianas eléctricas, tanto en el interior como en el exterior.
Las puertas interiores de las aulas son de madera con superficies chapadas en roble. Los suelos son de vinilo acústico y la escalera está acabada con revestimiento de terrazo.
