¿Qué papel cumple el mobiliario urbano en el espacio público? Acorde a los comportamientos humanos en sociedad, el diseño de los espacios públicos se enmarca dentro de una investigación compleja que comprende, además del análisis de usos, la participación de la comunidad, el estudio de las condiciones climáticas y geográficas, la economía de recursos, entre tantos otros factores, la selección de equipamientos y elementos urbanos adecuados para satisfacer las necesidades de una gran proporción de la población. Como sostiene el arquitecto y urbanista español Oriol Bohigas Guardiola, la arquitectura además de un arte es un servicio directo a la sociedad. Por ende, la armonía entre las múltiples disciplinas que intervienen al mismo tiempo debería consolidar herramientas que mejoren y/o faciliten la vida en comunidad. Comprender el rol que ocupa el mobiliario urbano al colaborar en el desempeño de ciertas actividades según su manera de disposición, sus dimensiones, su materialidad y vida útil a largo plazo forma parte importante del funcionamiento actual y a futuro de los espacios urbanos.
El comienzo del desarrollo del mobiliario urbano se remite a la Revolución Industrial. La ciudad de Paris mostró una preocupación por el urbanismo y su ordenamiento hacia mediados del siglo XVIII que incentivaron al orden y el desarrollo del espacio público urbano junto al mobiliario. Ya en el siglo XIX, comenzaron a desarrollarse los equipamientos ligeros en el espacio público de Francia como luminarias, fuentes de agua, rejillas de arborización, etc. pero recién a partir de los años 60 en el siglo XX, comenzó a utilizarse el término mobiliario urbano en sí, reaccionando a una acumulación desordenada e inorgánica de objetos y construcciones en el espacio urbano. Desde losas, losetas y celosías hasta guarniciones, elementos precolados y mobiliarios urbanos, Basaltex expone diferentes productos haciendo énfasis en la durabilidad, la calidad y la versatilidad del concreto en la industria de la construcción.
Dentro del espacio público, la perdurabilidad y el mantenimiento de los elementos a la intemperie acompaña la toma de decisiones de muchos profesionales de la arquitectura, el urbanismo, el diseño y también el paisajismo cuando se definen los materiales, recursos y técnicas de construcción a implementar. Al momento de proyectar sobre entornos urbanos, la consideración de normativas municipales según cada región, los intereses de diferentes actores sociales, políticos y económicos, o mismo el grado de intervención de la comunidad en el proceso de diseño envuelven un compromiso que involucra a muchas áreas de actuación, donde por ejemplo utilizar elementos prefabricados en vez de realizados in situ impactará no solo en los costos de producción sino también en un ahorro de tiempos de ejecución. A continuación, analizamos la aplicación de elementos de concreto fabricados por Basaltex que involucran desde piezas especiales hasta mobiliarios urbanos en proyectos de espacios públicos en amplias escalas y con diferentes propósitos.
Reciclando infraestructuras urbanas: Parque Fresnillo
El Parque Fresnillo, diseñado por Rozana Montiel | Estudio de Arquitectura + Alin V. Wallach, recicla un canal pavimentado de aguas negras para transformarlo en un patio de juegos dentro de una unidad habitacional ubicada en Fresnillo, Zacatecas. Mejorando la calidad de vida en el complejo de viviendas, buscaron crear un lugar de reunión con juegos integrados, áreas de descanso y demás a partir del reciclaje de una infraestructura existente que permitiera convertir el paisaje urbano en el propio programa. Acorde a las necesidades de cada espacio y cada proyecto, las bancas urbanas de Basaltex plantean una diversidad de disposiciones, formas y funciones posibles en orden a fomentar diferentes actividades, conexiones y vínculos entre los usuarios y los espacios que transitan.
Activando espacios públicos: Pabellón Mextrópoli 2019
El Pabellón Mextrópoli 2019, construido por Factor Eficiencia y diseñado por Suma Estudio | Roberto Aguilar, Diego García, Fernando Franco, Diego Aguilar y Jalil Miguel, se compone de una estructura de madera con montones de tezontle, una piedra originaria de México y de algunas regiones de Estados Unidos utilizada para la construcción. Difuminando los límites entre el exterior y el interior a través de cortinas traslúcidas, la propuesta busca conectar con la infancia donde cada uno de sus visitantes experimenta su propia experiencia sensorial. Los prismas de concreto de Basaltex forman parte de un espacio ligero y sutil que busca activar el espacio público.
Conformando paseos costeros: Malecón de Mazatlán
El Malecón de Mazatlán en Sinaloa presenta una extensión de alrededor de 21 kilómetros de longitud y fue construido por primera vez en la década de 1820 con el objetivo de proteger a la ciudad de inundaciones y huracanes. Basaltex ha desarrollado las superficies de piso con elementos prefabricados de concreto de alta calidad. Si bien el espesor de los solados puede variar según las condiciones y tolerancias de cada proyecto en particular, las piezas también pueden fabricarse en diferentes formatos como losetas, adocretos, cintillas y losas táctiles, de amplias gamas de colores y texturas. De esta manera, es posible disponer diversos patrones de solados junto a mobiliarios urbanos de características variables creando propuestas adaptables y flexibles que contemplen a niños, jóvenes, adultos y personas mayores.
Consolidando áreas de encuentro: TEC de Monterrey Ciudad de México
El TEC de Monterrey, Ciudad de México presenta desde sus espacios exteriores y accesos una distribución de pisos prefabricados de Basaltex en diversos formatos junto a bancas rectas y losas táctiles que conforman espacios de encuentro para la interacción entre estudiantes, profesores, empleados y todo aquel que transite el espacio. La combinación y el diálogo con la vegetación que se relaciona con la generación de luces y sombras, la disposición de espacios de permanencia o descanso y el tránsito fluido en las áreas de circulación acompaña la ubicación de mobiliarios urbanos en ciertos sectores aportando bienestar y confort a la experiencia al aire libre de los usuarios del establecimiento.
En síntesis, estos proyectos demuestran su capacidad de transformar los espacios con mobiliarios en hormigón ya sea combinando diferentes texturas y formatos de piezas, generando juegos de luces y sombras, y aportando nuevas funciones a espacios ya consolidados y/o de nueva generación.