Los precios han aumentado entre 15% y 20%. El sur chico, con énfasis en Mala, es atractivo para las inmobiliarias.
El precio por metro cuadrado depende de las áreas comunes que ofrezca el proyecto, como canchas de fútbol, piscina y zona de parrillas, así como de la implementación de servicios básicos y la conectividad con la ciudad.
A pesar de la coyuntura económica, la demanda por casas de campo crece con respecto al 2022, con avances entre el 12% y 15%, según Sandro Vidal, director de RE Propiedades. Por ello, han empezado a surgir nuevas zonas para el desarrollo de este tipo de proyectos.
“Hay una tendencia por usar las casas de campo como primera vivienda. Lo vemos en Lurín y Pachacamac, donde ya hay grandes colegios cerca”, explicó Sandro Vidal.Además, aseguró que el rango geográfico para desarrollar estos proyectos se ha ampliado.
El experto detalló que Los Portales y Centenario realizan este tipo de proyectos en la zona sur de Lima, “como una especie de casas playa-campo, pero que terminan siendo de campo”.
Por ejemplo, Los Portales tiene el proyecto Lotes Asia – La Alborada en el kilómetro 104 de la Av. Panamericana Sur. Si bien se ubica cerca al Boulevard de Asia, no cuenta con acceso a la playa. Centenario cuenta con el proyecto Montemar en el Kilómetro 77.5 de la Av. Panamericana Sur.
Concepto de campo en el sur
La empresa Menorca sigue esta tendencia. Sus dos primeros proyectos de casas de campo se construyeron en Cieneguilla: Finca entre Ríos (14 hectáreas) y La Quebrada (400 lotes). Ahora cuenta con un proyecto de campo en Punta Hermosa, Villas Punta Mar.
“Tiene el mismo concepto que La Quebrada (en Cieneguilla). El sur chico se ha convertido en una zona muy interesante para desarrollar casas de playa-campo”, dijo Manuel De La Barrera, gerente central comercial de Menorca Inversiones.
Por su parte, Asia del Campo está contruyendo el condominio Las Dunas, que cuenta con 429 lotes de 300 metros cada uno, en el Valle de Asia.
“(En dicha zona) hay alrededor de 30 condominios, todos de campo. Son como pequeñas ciudades, con lagunas, gimnasios, parques. Nos hemos especializado en este tipo de proyectos”, comentó José Luis Reinoso, gerente general de Asia del Campo. La empresa también tiene los condominios La Finca (37 lotes), Puerta del Sol (330) y San José (297).
Menorca también ha apostado por la construcción de tres torres de edificios en Mala, Cañete. La acogida fue tan alta que se vienen dos proyectos similares más. Asia del Campo también empezará con el desarrollo de proyectos en Mala.
“A pesar de la coyuntura compleja, el mercado se sigue moviendo y las personas tienen mucho interés en comprar casas de campo en el sur por la revalorización, que es de casi 20% anual”, refirió Reinoso.
Precios por metro cuadrado
Vidal, de RE Propiedades, indicó que los precios se han elevado al ritmo de la demanda, entre 15% y 20%. Sin embargo, recalcó que el valor del metro cuadrado varía mucho, dependiendo de la zona en que esté ubicado el proyecto.
Por ejemplo, el precio por metro cuadrado en los proyectos de Menorca, en Cieneguilla, está alrededor de US$ 250. Pero, dependiendo de la ubicación, los espacios también pueden cotizarse en US$ 140. Por su parte, Asia del Campo ofrece el metro cuadrado de sus proyectos desde los US$ 110, aunque en la zona sur pueden llegar hasta los US$ 425.
Vidal afirmó que el precio siempre va a depender de las áreas comunes que ofrezca el proyecto, como canchas de fútbol, piscina y zona de parrillas, así como de la implementación de servicios básicos y la conectividad con la ciudad.
Reinoso señaló que los proyectos de casas de campo en el sur están a 45 minutos de Lima y se ubican en zonas donde el clima es bueno.
Perfil del inversionista
La mayoría de compradores de casas de campo son usuarios finales. “A diferencia de lo que ocurre con las casas de playa, el sector de campo no es visto siempre como motivo de inversión para alquiler”, sostuvo Vidal.
Sin embargo, esporádicamente hay quienes adquieren grandes lotes con la finalidad de arrendarlos como restaurante campestre o local para celebraciones.
“También se observa una democratización en el interés por casas o lotes en zona de campo. Antes solo venía de los niveles socioeconómicos A y apenas el B. Ahora baja mucho más”, destacó Vidal.
Cortesía : Diario Gestión