El Premio Internacional de Arquitectura del Paisaje Cornelia Hahn Oberlander, que se otorga cada dos años, fue establecido para aumentar la visibilidad, comprensión, apreciación y diálogo en torno a la arquitectura del paisaje. La creación del Premio Oberlander comenzó en 2014, y el laureado más reciente fue el arquitecto Kongjian Yu, pionero del concepto de «Ciudad Esponja». Este año, The Cultural Landscape Foundation (TCLF) anunció que el arquitecto paisajista con sede en la Ciudad de México, Mario Schjetnan, y su firma Grupo de Diseño Urbano (GDU) resultaron ganadores del Premio Oberlander 2025. Según TCLF, Schjetnan pertenece a una generación de paisajistas, arquitectos y urbanistas que se dieron cuenta de los impactos ambientales del desarrollo urbano y sus consecuencias para la vida, el planeta y sus habitantes. Schjetnan junto a su equipo de GDU son los primeros latinoamericanos en recibir el Premio Oberlander.
Mario Schjetnan, fundador de Grupo de Diseño Urbano (GDU), obtuvo su título de arquitectura en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM, 1968) y una Maestría en Arquitectura del Paisaje en la Universidad de California, Berkeley (1970). En 1977, estableció GDU junto al arquitecto José Luis Pérez, acompañados por sus respectivas esposas, Irma Schjetnan y Letty Pérez. Desde entonces, la firma ha trabajado extensamente en México, América Latina, Medio Oriente, China y Estados Unidos, desarrollando proyectos en arquitectura del paisaje, urbanismo y arquitectura. Casi la mitad de su trabajo se centra en parques, junto con desarrollos residenciales, sitios postindustriales, museos y otros proyectos.

Reconocido por avanzar en el diseño urbano basado en la conciencia ambiental, la memoria cultural y la calidad de vida, Schjetnan ha promovido una nueva relación ética y estética con el entorno. Definiendo la filosofía de GDU, enfatizó que «el paisaje realmente se trata de cultura» y que cada proyecto es «específico del lugar». Para él, «si deseas desarrollar un sitio o un área nueva, debes comenzar con un parque». Reflexionando sobre su carrera, afirma que su búsqueda central se basa en «mejorar la habitabilidad en las secciones más pobres de México y América Latina para proporcionar justicia social y equidad urbana, como así también en las secciones más ricas». Además, mantiene que existe un «derecho humano al espacio abierto».
El trabajo de Mario Schjetnan se inspira en una amplia gama de influencias, incluidos los arquitectos modernos mexicanos Luis Barragán, Max Cetto y Mario Pani; arquitectos paisajistas Roberto Burle Marx y Lawrence Halprin; y artistas y escritores como Diego Rivera, José Clemente Orozco, Juan O’Gorman, Carlos Fuentes y Octavio Paz. Enraizados en el patrimonio prehispánico de México, sus diseños integran valores culturales y ecológicos. Antes de fundar GDU, Schjetnan fue el primer director de diseño urbano y de vivienda en INFONAVIT (1972–1977), donde supervisó proyectos en 110 ciudades de México, produciendo aproximadamente 100,000 unidades de vivienda, incluyendo 5,000 en la Ciudad de México. El portafolio de su firma incluye obras emblemáticas como el Parque Chapultepec, el Parque Ecológico de Xochimilco y el Parque Eco-Arqueológico Copalita, junto con grandes parques urbanos creados en sitios industriales recuperados, como el Parque La Mexicana y el Parque Bicentenario en la Ciudad de México.


Schjetnan y Grupo de Diseño Urbano fueron seleccionados entre más de 300 nominaciones en todo el mundo por un jurado internacional de siete miembros compuesto por destacados paisajistas, urbanistas, arquitectos y académicos. El Premio Internacional de Arquitectura del Paisaje Cornelia Hahn Oberlander reconoce a los profesionales que son «excepcionalmente talentosos, creativos, valientes y visionarios», con un cuerpo significativo de trabajo construido que ejemplifica el arte de la arquitectura del paisaje. Charles A. Birnbaum, presidente de The Cultural Landscape Foundation, destacó el «compromiso inquebrantable de Schjetnan con el derecho humano al espacio abierto» y su integración de valores culturales en el diseño como «requisitos fundamentales para conformar un entorno construido equitativo para todos». El Premio Oberlander, que se otorga cada dos años, incluye un premio de $100,000 y dos años de actividades de compromiso público centradas en el trabajo del galardonado y el campo más amplio de la arquitectura del paisaje.
El equipo actual de GDU incluye a: Mario Schjetnan (Socio Fundador y Director), Ana Schjetnan (Socia), Manuel Peniche (Asociado Senior), Marco A. González (Asociado Senior), Carlos Rascón (Asociado), José Luis Gómez Hidalgo, Héctor González, María de Jesús Tapia, Jimena Camacho, Estefanía Reyes, Brenda Arellano, Fernanda García, Carmen Rodríguez, Ana Campos, Andrea Ramírez, Fernanda Gómez, Ulises Victores, David Aizenman, Rubén Gómez, Gustavo Rojas (Asociado Externo), Rodrigo Hernández (Asociado Externo), Daniel Ramírez (Asociado Externo), Fabián Tron (Asociado Externo) e Ingrid Schjetnan (Asociada Externa).







