El Cercado de Lima alberga importantes joyas arquitectónicas de gran valor histórico, entre ellas la iglesia San Miguel Arcángel, mejor conocida como Las Trinitarias, ubicada en el barrio de Barrios Altos. Esta iglesia ha sufrido un notable deterioro debido al paso del tiempo, lo que ha afectado su estructura y fachada. Con el fin de evitar un daño irreversible, el Programa Municipal para la Recuperación del Centro Histórico de Lima (Prolima) ha lanzado un ambicioso proyecto de restauración para devolverle el esplendor que tuvo en la época virreinal.

En entrevista con la agencia Andina, el arquitecto Juan Manuel Parra Díaz, subgerente de Planificación, Gestión, Recuperación y Salvaguarda del Patrimonio Cultural de Lima en Prolima, explicó que los trabajos de restauración de la iglesia, ubicada en la cuadra 7 del jirón Ancash, estarán terminados para finales de junio de este año. Los esfuerzos se han concentrado en la parte externa del templo, restaurando la fachada principal, los laterales y el techo, que se encontraban en un estado crítico de conservación.
Este proyecto cuenta con una inversión de S/ 11 millones 560,706 y es la segunda iglesia con mayor presupuesto asignado después de la iglesia San Carlos, cuya restauración requirió S/ 9 millones 700,000. Parra destacó la complejidad del proceso, ya que ha sido necesario reforzar estructuras y muros, remover cerca de 24 capas de pintura de la fachada, restaurar el muro pretil, reparar la escultura del arcángel San Miguel y realizar trabajos en el techo del templo, todo con el fin de preservar la esencia original de la iglesia.
Para asegurar que la restauración se ajuste al diseño original, Prolima ha recurrido a documentos gráficos de la década de 1870. En las antiguas fotografías se pudo observar que el muro pretil, un elemento común en las iglesias de la época, separaba el espacio sagrado de la calle. Con el tiempo, este muro fue reemplazado por una reja moderna, pero en la restauración se ha decidido recuperar el muro pretil original. Además, se han encontrado y restaurado cuatro puertas históricas de la iglesia, incluida una que estaba oculta y que podría haber sido una de las primeras portadas de la iglesia.

Otro aspecto importante de la restauración ha sido la recuperación de elementos icónicos, como los limosneros de madera, el conjunto escultórico de la Coronación de la Virgen y la escultura del arcángel San Miguel. Este último es especialmente relevante, pues representa al protector de las religiosas del monasterio de las Trinitarias. La escultura mide aproximadamente 1.80 metros y tiene un dragón de tres cabezas bajo sus pies, simbolizando la victoria sobre el mal.

Uno de los mayores retos para Prolima ha sido la restauración del techo de la iglesia, donde será necesario reemplazar las vigas de madera desgastadas por nuevas vigas de cedro. Esta intervención, que dará inicio en mayo, es compleja debido a la disposición arqueada de las tablas del techo. Una vez finalizadas las labores, el templo contará con un sistema de iluminación moderno y ornamental que resaltará sus detalles arquitectónicos. Los trabajos de restauración comenzaron el 12 de junio de 2023 y se espera que concluyan el 30 de junio de 2025, con la participación de cerca de 100 profesionales, entre ingenieros, arquitectos y personal especializado.

La iglesia de Las Trinitarias, inaugurada en 1722, tiene una rica historia que se remonta a 1676, cuando se solicitó la licencia para fundar el monasterio. En 1708, se colocó la primera piedra de la iglesia bajo la advocación de la Santísima Trinidad, y gracias al apoyo del protector Bernardo Gurmendi, un caballero de la Orden de Santiago, se completó la construcción del templo. La iglesia se dedicó a San Miguel, patrón de las religiosas del monasterio, y fue finalmente inaugurada catorce años después, en 1722, durante el arzobispado de Fray Diego Morcillo.
